LA SENDA CONSCIENTE
Diferencia entre Ilusión y Realidad
La ilusión es cambiante, inestable, débil y vulnerable, se transforma, tiene principio y final, va y viene, y se limita en un espacio de formas y sombras divisibles, y para la razón visibles. Es variable, difusa, sospechosa, dudosa e inconstante e inconsistente, conflictiva, manipulable, se desvanece y desaparece porque es nada y de la nada parece surgir cuando vuelve a aparecer, y se la suele recordar junto a otras ilusiones, copias de multitud de moldes o patrones repetitivos, imitables y faltos de originalidad acompañada por un pasado, e imaginada y adornada por un futuro de aparentes infinitas aun siendo finitas impredecibles y a su vez predecibles posibilidades, velando ilusoriamente tan solo temporal aunque inevitablemente así a la realidad. La ilusión no Es.
La realidad es inmutable, estable, fuerte e invulnerable, no se transforma no cambia, es invariable, confiable e inmanipulable, no nace ni muere, ni va ni viene, certera, serena, sensata, segura y nítida, constante y consistente, atemporal, es un eterno presente inalterable y original, no aparece ni desaparece porque siempre es, siempre esta, y es visible para la intuición pues es luz, ella es la que paciente y firme en sus pilares de luz permite gentilmente e indiferente el sueño de la libre elección del aparente e insustancial velo de humo de la inconsistente ilusión, pues es indudablemente ajena a lo inexistente. La Realidad siempre Es, pues en ella nada tiene causa y efecto, nada la amenazada ni sustituye, pues todo lo abarca y no es contenida ni limitada, es indivisible e inimaginable, única, irrepetible e inimitable, porque sencillamente siendo, Es Todo y Una.
LA SENDA CONSCIENTE
LA SENDA CONSCIENTE